Cada vez somos más los que apostamos por el ahorro energético, ya que sus beneficios van mucho más allá de la reducción de costes en la factura de la electricidad.

Todos podemos contribuir a la conservación de nuestro planeta intentando ser cada vez más independientes a nivel energético. Gracias a las ayudas oficiales esto ya es una realidad al alcance de todos, ya que en la actualidad los trámites y las condiciones que antes eran mucho más burocráticos se han flexibilizado.

Apostar por las energías renovables ayuda a preservar los recursos, genera empleo entorno al sector, reduce nuestra huella de carbono y disminuye los efectos del cambio climático.

Particulares, Empresas y Comunidades, el cambio comienza en cada uno de nosotros y en nuestros hábitos de consumo y de gestión, incorporando pequeños gestos y acciones a nuestra vida cotidiana, de tal forma que con el tiempo podamos crear una mayor conciencia ecológica a nivel global.

En este camino hacia el ahorro energético podemos aplicar algunas sencillas medidas tanto en casa como en la oficina. Tal vez algunas de ellas ya las conozcas, pero lo cierto es que, si no las interiorizamos en nuestras rutinas diarias en la mayoría de los casos seguimos sin cumplirlas a raja tabla:

  1. Utiliza bombillas de bajo consumo.
  2. Apaga las luces cuando no sea necesario su uso y aprovecha al máximo la luz natural en aquellas estancias que dispongan de ventanas o puertas acristaladas.
  3. Aprovecha el calor residual de tu placa vitrocerámica u horno. Tu preparación terminará de cocinarse perfectamente aun apagando 10 minutos antes el electrodoméstico. Esto no será posible con las placas de inducción, ya que éstas pierden la temperatura al desconectarlas.
  4. Y además, ya que hablamos de cocina, donde pasamos gran parte del tiempo cuando estamos en casa… ¿sabías que usar tapas al cocinar hará que la preparación se cocine antes?
  5. No uses el “Stand by” ¿Sabías que los aparatos que dejas conectados, aunque apagados, consumen energía? Todo aquello que no estés usando, desconéctalo.
  6. Realiza un estudio de eficiencia energética en tu hogar y aplica los correctivos necesarios para garantizar que se mantiene una temperatura adecuada en el mismo. Esta es una medida muy eficaz para el ahorro energético.
  7. Cuidado con la puerta de la nevera o el congelador, tanto en casa como en el supermercado. No mantengas la puerta abierta mientras decides lo que vas a coger, ya que esto hace que el frío se escape y provoca un aumento del consumo de energía del electrodoméstico.
  8. Por supuesto, ya que hablamos de electrodomésticos, si vas a comprar algún aparato nuevo fíjate bien en su etiqueta energética. La simplificación de la etiqueta energética de los electrodomésticos, volviendo a la escala inicial de la A a la G ya es una realidad. Desde el 1 de marzo de 2021 ya es obligatorio que los electrodomésticos incorporen la nueva escala energética. Puedes obtener más información sobre este tema en la OCU.
  9. Comprueba qué tarifa de la luz tienes contratada con tu operador y realiza aquellas actividades de más consumo durante las horas valle. Lavadora, secadora, plancha, cocina… en horas punta, al ser de más demanda, tendrán un coste más elevado.
  10. Y finalmente, como no podía ser de otra manera ¡pásate al autoconsumo! Las placas solares con la mejor medida que podrás poner en práctica para ahorrar energía. En Suntelco somos especialistas con una dilatada experiencia y podemos ayudarte con tu proyecto. Ofrecemos soluciones integrales a medida, para que tú no tengas que preocuparte por nada. Consúltanos sin compromiso.